Todos sabemos cuál es la ruta ¿Verdad? ¡Mentira! Vos no sabes cuál es la ruta. Ni yo. Nadie la sabe, por eso es que Daniel Ortega y los sandinistas mantienen la ocupación militar de Nicaragua. Porque nadie sabe cómo sacarlos de ahí. Es más, de lo único que estoy seguro es que la ruta no es una resolución de de la OEA o un informe de Expertos en Derechos Humanos de la ONU.
Todos sabemos lo que queremos, es decir «la meta». Queremos vivir en paz, democracia y con dinero suficiente para pagar la comida, la ropita y la panadol para cuando nos quebremos la pata tratando de caminar en el piso de cartón de un bus ruso.
Esa es la meta y el gran obstáculo para llegar a esa meta es Masacrín. Ahora solo nos falta saber la metodología apropiada para alcanzar el objetivo. Es decir, la ruta.
La ruta para salir del ijuelagranfruta (Daniel Ortega)
Otra vez pues ¿Cuál es la ruta?
No sabemos. Nadie sabe.
Entonces ¿Cómo hacemos para hallarla? ¿Qué pasa si ponemos «Democracia» en Google Maps? Si estás en Managua, seguro te sale un barrio o una escuela que lleva democracia en el nombre, pero te apuesto que ahí no vas a encontrar lo que andamos buscando.
Cuando estudié mi Piechdi en Biotecnología nuclear (en La American Yuneversity, campus Villa Sandino), mis maestros me enseñaron que para encontrar la cura a una enfermedad, primero tenemos que descubrir su causa. No los voy aburrir con todos los procedimientos técnicos que hay que seguir para llegar a ese momento que nosotros los científicos llamamos eureka. Mejor se los resumo y ustedes más abajo me dejan la donación en concepto de contribución a la ciencia.
La causa se resume en una palabra: educación
La educación, o mejor dicho, la falta de educación es el origen de todos los males que aquejan a Nicaragua. Dale, te reto a buscar un problema que tiene Nicaragua actualmente y que no se deba a que con costo sabemos leer y escribir. Siendo Masacrín el mejor ejemplo.
Te lo pongo de esta manera: vos pones a Daniel Ortega a defender la casa piñateada de Morales Carazo (lo que en sus discursos él llama «la revolución») y ni el AK se aguanta. No puede, y tampoco pueden ninguno de los más de 100 parásitos que viven ahí hacinados con él.
Pero Daniel Ortega está fresco en su casa piñateada, porque no necesita ser él quien defienda «la revolución». Tiene para eso a un ejército (literal) de policías, paramilitares y soldados.
No es el dinero, es la ignorancia
Y ese ejército de empleados dispuestos a matar y morir por su Comandante, no están ahí porque los está haciendo ricos. Eso es lo que nosotros nos decimos para entender cómo puede haber tanta maldad en el corazón de un hermano nicaragüense. «Seguro es porque les están pagando bien». Pero no, no es esa la razón. O por lo menos, no es esa la razón principal.
Hablando con un amigo que estuvo preso (de los 222), me contó como al suave fue entablando una relación con los policías que lo custodiaban. Me dijo que no todos eran malditos. Es más, me dijo que si él tuviera que describir en una palabra a estos policías, usaría la palabra «humilde» (entiéndase como poca escolaridad por razones económicas). Me confesó que la experiencia le abrió los ojos de cómo nosotros (todos) le hemos fallado a Nicaragua.
Otros presos políticos han comentado que los interrogatorios, más que otra cosa, lo que daban era pesar. Eran una monumental exhibición de ignorancia de parte de los policías.
La falta de educación tiene raíces profundas en Nicaragua
En los años 80, cuando por fin salimos de los Somoza, Nicaragua se propuso seguir los pasos de Costa Rica. Con gran fanfarrea se inició una jornada de alfabetización masiva. Pero ¿Qué pasó? En vez de rectificar décadas de atraso, los sandinistas decidieron transformar la iniciativa en una gran campaña de propaganda partidaria. Supongo que para que hiciera juego con la educación primaria de esos tiempos (2 granadas más 3 granadas igual a un cachorro de Sandino).
Intencionalmente o no, gracias a los sandinistas Nicaragua perdió la oportunidad de avanzar y más bien profundizó su deficiencia educativa.
Es famoso el caso de Intel (el fabricante de procesadores), cuando quiso montar una fabrica en Centro América, rápidamente tuvo que descartar Nicaragua porque no hubo suficientes ingenieros. ¿Te imaginas esa tabla de comparación?
Aceptémoslo, la encuesta de M$R no es 100% ficción. En Nicaragua hay gente que realmente cree que Daniel Ortega debe ser presidente. No fregues, si hay nicas que están en Estados Unidos haciendo realidad su sueño americano, pero que todavía defienden a Masacrín.
No hay que ser autoreferenciales
Para vos y para mi es evidente que Daniel Ortega es dictador, ladrón, violador, etc. Pero vos y yo tuvimos un mínimo de educación. Para el sandinista que con costo sabe leer, el asunto no está tan claro.
Una estadística que nunca se me va a olvidar es aquella que solo 2 de cada 100 nicaragüenses se logra bachillerar. ¿De qué manera te explicas que la principal razón de ser de los sandinistas era terminar con la dictadura dinástica de los Somoza y ahora dan la vida por los Ortega Murillo?
Vos escuchas un discurso de Daniel Ortega y te suena a divagación simplista redundante. Una ofensa cognitiva a cualquier ser pensante. Pero él sabe a quién le está hablando. El publico meta de Masacrín tiene un nivel de escolaridad tan bajo, que no solo escucha con atención las estupideces que dice, además le cree y por ende lo hunde aún más en la profunda ignorancia.
Porque a los sandinistas no les basta con no educar a las mayorías de Nicaragua. Además les alimentan la mente con el equivalente de sardinas soviéticas que vencieron en 1980. Por algo los brutos de UNEN hoy en día son la élite intelectual del Partido.
El otro día yo les hablada aquí en Bacanalnica que los medios son un ingrediente imprescindible del manjar que llamamos democracia. Pues saber leer y escribir, y eventualmente entender lo que producen esos medios, obviamente es un ingrediente más importante. Es como querer hacer gallopinto sin frijoles. No papito, eso es arroz frito.
La ruta es educación primero, educación después y para terminar: educación
En conclusión, la educación ha sido, sigue siendo y será (por lo menos por un tiempo), el origen de todos nuestros males. Así que la ruta es educación primero, educación después y para terminar: más educación. Porque esa es otra cosa, la educación toma tiempo. Constancia. Esfuerzo.
El potencial ahí está. No es casualidad que Metapa ahora se llama Ciudad Darío. Fue un nica el que agarró el idioma de la Castilla y lo hizo suyo. Lo agarró y le dio vuelta como calcetín. Quién quita y ahorita en Ciudad Sandino hay un chatel que podría crear el nuevo Facebook. Solo necesita un poquito de educación.
Estoy totalmente de acuerdo con el análisis. Casi todos los alfabetizadores siendo adolescentes se tragaron la propaganda y creen que fue un acto heroico. No los culpo, sintieron que se entregaban por su país en beneficio de los menos favorecidos, Pero parte de los 222 y otros que ya desaparecieron fueron cómplices de la estructuración y diseño partidizado de la campaña de alfabetización. Siendo adulto participé en la campaña, pero a medida que progresaba en el tiempo me daba cuenta de la inducción partidaria, de la cual no participaba. Pero aparte de eso, hay gente que cree ciegamente en lo que les dice el Sr. Ortega y son capaces de matar o destruir por defenderlo. El no necesita fusil, además, le teme a las explosiones de las balas que salen del calibre. Pero tiene un cuerpo de expertos francotiradores que silencian cualquier brote de protesta.
Manuel, estoy completamente de acuerdo con vos: solo quiero que me aclars algo… en la nicaragua(con minuscula por que eso no es pais,es hacienda) hoy en dia y en futuros años; DONDE VAN A RECIBIR ESA EDUCACION LOS CHAVALOS?, En serio,averiguame o aclarame eso;DONDE?!