Hay dos Dantes en nuestras vidas. Alighieri, el poeta que se fue a pasear al infierno; y Mossi, el banquero que lo financia. OK, estoy exagerando. Dante Mossi, el Presidente Ejecutivo del Banco Centroamericano de Integración Económica no financia el infierno propiamente dicho, pero casi. La institución que dirige se ha destacado por mantener abierto un flujo de recursos que oxigena a la dictadura de Daniel Ortega. Mientras el mundo entero sanciona y cierra puertas, el BCIE desembolsa. Business as usual.
Por lo menos, hasta ahora.
¡Los números son política!
Opositores y líderes de opinión de la región centroamericana, criticaron la complacencia del BCIE con la dictadura. Mossi respondió diciendo que ellos se fijan en los números, no en la política. Pues, los asesinados (más de 350) y los exiliados (más de 100 mil) también se cuentan. ¡Dale un vistazo a los reportes de la CIDH!
La reacción fue tan negativa, que Mossi tuvo que salir a explicar los parámetros del involucramiento del BCIE con Nicaragua. Créanme, para que un maje de estos salga a responder preguntas de un periodista, tiene que haber hecho un encave de nivel épico.
«El BCIE no es una institución para velar por la democracia. Ahí esta la OEA que se encarga de debatir políticamente lo correcto e incorrecto en su óptica, según su mandato. El mandato del BCIE no tiene que ver nada con esos temas. yo a esos reclamos digo, la agenda nuestra en Nicaragua es una agenda al servicio del pueblo nicaragüense independientemente de quién este dirigiendo los destinos de ese país.»
Dante Mossi, Presidente Ejecutivo del BCIE – Entrevista a Voice of America, Septiembre 6, 2021.
¡Ah, si!…la OEA. A esa también le tenemos tema, D.
¡Gracias por el clavo, Masacrín!
Mossi y el BCIE tienen un problema de imagen. La deriva autoritaria de Daniel Ortega y Rosario Murillo es tan vergonzosa y brutal, que cualquier personaje o entidad que tranza con ellos se contamina por asociación. Desde la diseñadora Shantall Lacayo hasta los empleados públicos de alto rango.
En efecto, los programas que financia el BCIE benefician directamente a la población. Justo esta semana, los proyectos de ampliación de la red eléctrica colmaron la cobertura de los medios.
¡Qué alegre! Ahora los paramilitares no van a tener que usar focos cuando lleguen en la noche a saquear tu casa y secuestrarte. Podrán mejorarnos la infraestructura, pero el verdadero desarrollo es imposible, viviendo bajo una dictadura.
El aparato de propaganda de la Vieja Arrimada™ se encarga de presentar estos proyectos como si fueran posibles solo por obra y gracia de ella y su consorte, así que empiecen rapidito a decir «¡Gracias al Comandante Daniel y la Compañera Rosario!».
Desde los tiempos del otro genocida
Los batracios oficiosos quieren hacerte creer que los proyectos financiados por el BCIE vienen regalados por el Comandante, nivel canasta navideña. En realidad, el BCIE se fundó en 1961. Eso quiere decir que Luis Somoza Debayle, René Schick, Lorenzo Guerrero, Anastasio Somoza Debayle, la Junta de Gobierno de Reconstrucción Nacional, el Daniel Ortega ochentero, Violeta Barrios, Arnoldo Alemán y Enrique Bolaños también merecen «agradecimiento» por los proyectos que el BCIE financió.
Si en su momento no pidieron gratitud, ¿quién los manda a andar de lentos? Nadie le gana a los Ortega Murillo en lo que se refiere a ganar puntos con plata ajena.
Como ven, ¡el BCIE tuvo como contraparte a Somoza! Uno creería que el «orgullo revolucionario» del Comandante lo llevaría a renegar de la institución, pero nada de eso trajo el barco.
A pues sí…ellos trabajan con cualquiera
Ya ven, pues…el BCIE ha trabajado con todos los gobiernos, incluyendo los dictatoriales.
Pero también es una sobre-simplificación, cuando Mossi dice que solo se fijan en los números y no en la política.
En Marzo del año 2020, el BCIE suspendió el desembozos de un préstamo de 7.6 millones de dólares a la Policía Nacional de Nicaragua. ¿La razón? La institución acababa de ser sancionada por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos. Las directrices del banco impiden brindar financiamiento a ciertos actores, incluyendo instituciones o sujetos marcados por sanciones.
El día que se sancione al Gobierno de la República de Nicaragua como tal, ahí van a ver a Mossi negándole crédito a su cliente VIP. Sorry (not sorry), Masacrín.
Un palacete para DOS
Resulta que este 15 de diciembre, estaba programado a inaugurarse una nueva sede del BCIE en Managua. El proyecto se empezó a construir en octubre del año 2019, cuando Mossi visitó Nicaragua para una ceremonia en la cual él y el Ministro de Hacienda Iván Acosta pusieron la «primera piedra» del edificio valorado en 16.5 millones de dólares.
No lo sé, Rick….ya el tigre había enseñado las rayas, matando a centenares de ciudadanos, y el BCIE, en un derroche de delicadeza y sensibilidad hacia el dolor humano, siguió adelante con la construcción de un palacete. Yo de ellos me quedo en la covacha que tenían desde los 70 en el Edificio Málaga de Plaza España, pero bueno…por algo no soy banquero.
Recientemente, el delegado de Costa Rica, Ottón Solís, reveló las faraónicas remuneraciones y beneficios que los funcionarios del BCIE se recetan a sí mismos, amparados por sus gobiernos. Imagínense….esto no es banca privada, donde el lucro es, a todas luces, el fin ulterior. Es una especie de banco multi-estatal, enfocado en promover el desarrollo de los países más pobres del Continente. El contraste entre misión y remuneración es chocante. Pueden leer el testimonio sobre los abusos en la cúpula del BCIE aquí.
Si no se sonrojan dándose salarios de más de 18 mil dólares…no les va a temblar la mano aprobando la construcción de un edificio de casi 17 millones en un país virtualmente en guerra.
Excepto cuando a suficiente gente le crece la consciencia.
Si la inauguración es «virtual»…¿la gente se daría cuenta?
A escasas dos semanas de la inauguración, 11 de los 13 estados que pertenecen a la directiva del BCIE votaron para suspender la inauguración y la reunión de directores que tendría lugar a continuación. Ahora, se ejecutará de manera virtual. Sólo dos países votaron contra la moción. ¿Adivina cuales?
¡Nicaragua y Honduras! El feudo de Masacrín, y la cuna de Mossi.
La razón oficial es que «el edificio no está listo». Sin embargo, la tormenta perfecta provocada por las reacciones a las declaraciones de Mossi, y el desconocimiento de los resultados de las elecciones presidenciales del 7 de Noviembre, puso al BCIE en una posición incómoda. Ya ni ellos pueden hacer de cuentas que aquí «todo está normal».
«Después de las elecciones en Nicaragua, desconocidas por la Organización de Estados Americanos (OEA), al Banco se le hace muy difícil que su director aparezca en la foto con Ortega”.
Ottón Solís, Ex Representante de Costa Rica ante el BCIE – Confidencial, Diciembre 1, 2021.
Para una dictadura que trafica con las apariencias, la inauguración del nuevo edificio del BCIE era una oportunidad de oro. Un legítimo regalo de navidad para los medios batracios.
«Con solo que llegara Mossi, le bastaba a Ortega y Murillo para decir que contaban con el respaldo del Banco”.
Ex funcionario anónimo del BCIE – Confidencial, Diciembre 1, 2021
Bueno, el edificio ahí está. Nadie lo va a demoler. Y los medios batracios seguro van a hacer sus reportajes balurdes, pero se pueden ir olvidando de que Masacrín aparezca. Nadie lo ha visto desde el 8 de noviembre, cuando celebró su «reelección» diciendole «hijos de perra» a los presos políticos.
Ya sin esta fecha, seguro lo vemos hasta en la toma de posesión. Y ahí aparece solo porque si no llega, se le queda con la banda la Vieja Arrimada™.
Cuando los bancos SÍ se fijan en la política
La realidad también ha refutado las justificaciones de Mossi. Los bancos sí se fijan en la política, cuando no hacerlo se convierte en una amenaza existencial.
Recuerden como cuando el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos sancionó a varias estrellas de la dictadura, los bancos nicaragüenses tenían que cerrarles las cuentas y cancelarles las tarjetas de crédito. Por ley (¡soberana!…esa palabrita que tanto les gusta…), el gobierno de EE. UU. prohíbe a sus bancos tener negocios con sujetos sancionados. Si los bancos nicas querían mantener sus corresponsalías con sus contrapartes norteamericanas, pues…tenían que aplicarle la regla a los batracios. En este mundo globalizado, ningún banco puede darse el lujo de desconectarse del sistema financiero internacional.
Entonces…¿adivinen qué hicieron los bancos nicas?
Pues, le cerraron las cuentas y les cortaron las tarjetas a los cómplices de Ortega. Masacrín todavía esta tratando de terciar mediante leyes espurias, para que les agarren sus chancheros de vuelta, pero hasta la fecha, no han logrado nada.
Los números, y la política, se volvieron indistintos. Se fundieron en uno solo.
Ya estuvieras, Mossi. Es cuestión de tiempo para que la ilegitimidad del régimen lo convierta en una contraparte imposible, capaz de obstaculizar el acceso del BCIE a fondos internacionales. Al BCIE le va a pasar las de la banca nacional.
Sería una tragedia que Nicaragua perdiera acceso a estos fondos, pero la culpa no es de los países extranjeros, o los organismos internacionales. La culpa es de la dictadura.
¿Nos quedamos sin proyectos de electrificación, agua potable, vacunación?¿Sin financiamiento para la producción?
Bueno, a como le gusta decir a los extras que figuran en El 19 Digital…¡Gracias al Comandante Daniel y la Compañera Rosario!
Pero claro, Masacrín siempre grana. Seguro ya tiene planes de mudarse al edificio nuevo, en el evento de una evacuación del BCIE.
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