En los años 80, la gloriosa revolución sandinista se daba el lujo de escoger a los periodistas extranjeros que permitían escribir sobre la causa magnánima, justa y todo eso. Los chelitos se tropezaban por escribir bellezas sobre los comandantes y la Nicaragua sandinista que los amaba. De la misma manera que Corea del Norte ama a su supremo líder.
Era la guerra fría y el mundo estaba estupidizado (vean Rocky 4 para más contexto). Ni como echarle en cara a esos chelitos de entonces, que cayeran tan fácil en la trampa. Porque hay varios nicas, con premios internacionales y todo, que también cayeron en la trampa. Es más, algunos (los más premiados), hasta sostuvieron la trampa y pusieron el queso.
En los años 80, los sandinistas estaban de moda
El punto es que en los años 80, Daniel «El Masacrador de niños» Ortega, podía levantar el teléfono y escoger a quién le contaba, cómo el Imperio Yanki es culpable de que la economía de Nicaragua estuviera explotando como trikitraka.
Hoy en día, en esta segunda etapa de la revolución, la cosa esta más difícil. Todavía tiene a quién llamar. Porque como dueño del mayor emporio mediático que ha tenido Nicaragua ever, tiene multiples empleados que viven de sostener la cámara y el micrófono para que él hable. Pero no es lo mismo.
La media docena de canales de televisión abierta de los Ortega Murillo, pasan la vida tratando de competir con un puño de Youtubers palmados que generalmente doblan o triplican su audiencia. La Vieja Arrimada (Rosario Murillo) sale diario hablando en cadena nacional de radio y televisión. Pero ni dando premios logras juntar a 5 personas en Nicaragua que la hayan visto o escuchado.
En los años 2000, los sandinistas son menos fashion
La prensa internacional es otra historia. Allá en 2018 Daniel Ortega concedió varias entrevistas a medios extranjeros, pero dejó de hacerlo cuando se dio cuenta que la cuina que le funcionaba en los años 80, ya no servía en los 2000. Más allá de algunos medios (el equivalente al Canal 4 de Cuba, Irán y Rusia), nadie le estaba creyendo que él era la víctima y no el asesino de más de 350 nicaragüenses.
Solo unos chelitos le creyeron. Unos periodistas rebeldes de Estados Unidos que se auto-declaran anti-imperialistas. Y no solo le creyeron, bailaron el Comandante Zekeda con más sentimiento que el propio Parásito Navarro.
The Grayzone, tu mejor opción para publi-reportajes anti-imperialistas en ingles
Don Papaya escribió ya un par de veces sobre la conexión «The Grayzone-El Carmen» aquí en Bacanalnica (recomiendo leer «3 cosas que tenes que saber sobre Max Blumenthal y su relación con Daniel Ortega«). «La Zona Gris» es el negocio de Max Blumenthal y Ben Norton, dedicado a hacer publi-reportajes en ingles a Putin, los Castro y cualquier otro compañero revolucionario que no tenga el número de la BBC, CNN o Deutsche Welle (aunque todos sabemos que no es que no tengan el número de teléfono, es más bien que no les responden las llamadas).
En los últimos 5 años hemos visto como The Grayzone prosperó, gracias a las colaboraciones revolucionarias de los pueblos hermanos. En Nicaragua dicen que hasta casa tiene Ben Norton, de tantos rumbitos que le han salido gracias al Comandante y a la Compañera. Todo era prosperidad y éxito, hasta el día de ayer.
En realidad no sabemos cuándo fue el pleito, pero ayer fue que salió a la luz este video, donde Max Blumenthal increpa a su socio Ben Norton, por el billete que se le robó…
Ladrón aquí, mentiroso allá. Debo aceptarlo, estos majes de plano que se hicieron sandinistas, no era chafa para quedarse con el billete nada más. No me extrañaría que la casa que dicen que tiene Norton, sea piñateada de uno de los 316 despatriados.
Y la flaquita que defiende a Ben Norton parece que es su Rosario Murillo. Ojalá solo sea contra delitos monetarios y no llegue al nivel de la Vieja Arrimada que defiende violaciones y asesinatos. Ojalá. Esa pañoleta rojinegra me hace dudar.
Conclusión a mitad de precio
Ya saben el procedimiento, vayan a donar aquí abajo antes de leer la conclusión. Los espero.
…
Ok listo, recibí conforme, esta es la conclusión:
El gran perdedor de todo esto es Daniel Ortega. Porque este era el único aliada que le quedaba en el mundo real. Con este golpe a la credibilidad de los periodistas gringos pro-Putin, queda sin defensa contra CNN, BBC, DW, CBS, NY Times, WaPo, Reuters, en fin… todos los medios del mundo que no se creen el cuento de que él no es dictador. Que son todos, menos The Grayzone.
Dónde está el vídeo?