Queridos hoteles de Nicaragua, es hora que vayan viendo como van a hacer para alquilar todas esas habitaciones porque este año no vendrá nadie a visitarnos.
Primero el Gobierno Mexicano extendió una advertencia para aquellos ciudadanos que piensan venir a Nicaragua. Plan «Cosa tuya, cuate, pero «sabelo que ahí no nos quieren».
Y todo por culpa del estudiante mexicano que de la nada, se comenzó a dar tubazos mientras estaba hospedado en El Chipote. Miren, sí o no que es evidente que el mano este se busco unos tubos especiales para pegarse en los ojos hasta que vio, por un espejo, que se los había reventado?
Es el clásico «me voy a quedar ciego, dándome con un tubo para echarte la culpa». No papa, aquí #NoNosEngañaLaDerecha
Y ayer, casualmente, otra mexicana se fue llorando sólo porque la iban a llevar al Chipote a pasar el fin de semana o algo así. Uy, no es para tanto, si ahí ni te cobran la noche, ni la comida.
Luego, están los 6 de la Caravana Mesoamericana para el Buen Vivir que fueron detenidos por andar enseñando a los campesinos de Nueva Guinea a hacer hornos eficientes que utilizan poca leña una especie de bomba que no explota muy bien.
Pero bueno, seamos honestos, aquí los hoteles no viven hospedar turistas mexicanos o terroristas disfrazados de ecologistas. Mientras no corran a los gringos, estamos bien…
Alerta p estadounidenses q viajan a Nicaragua: Nuevas reglas del gob. Nic. para orgs d caridad o trabajo voluntario https://t.co/3tjgdX3zvt
— USEmbassy Nicaragua (@USEmbNicaragua) June 30, 2016
Se llamaba pues!
Ahora sí Hoteles, a poner tarifas de 3 horas si es que quieren sobrevivir el 2016.
estas ya son patadas de ahogado del orteguismo ya sienten la avalancha que se les viene encima y estan paranoicos desesperados alucinando con cualquier insignificancia que pueda encender esa mecha que hara estallar esa bomba de inconformidad que el pueblo pacientemente se guarda como la gasolina esperando la chispa para reventar todo lo que este a su lado incluyendo todos los tanques t-72 y el mismo mercedes blindado de ortega quien sembro una tormenta y cosechara una infernal tempestad