Olvídense de «te amo». Las dos palabras más lindas en cualquier idioma son «tenías razón».
A pesar de eso, no me da ninguna satisfacción que Manuel, el OG de Bacanalnica, las dijera en una columna reciente. OK, si nos vamos a poner técnicos, nunca dijo «Juan Carlos, tenías razón cuando decías que las elecciones eran una farsa»…¡pero se dejaba entender en el contexto!
¿Quién le hizo daño al tío Bacanalnica?
¿Quién más va ser? ¡Masacrín, pues!
Manuel abandonó su esperanza de que las elecciones del 7 de Noviembre serían nuestro mejor chance de salir de la dictadura. Yo inicié este viaje como escéptico, medio me convencieron de que había que votar, y ¡zas!, al final, resulta que yo tenía razón todo el tiempo.
Nunca cambien sus opiniones, muchachos.
Créanme, habría querido estar equivocado. No hay nada más bonito que salir de una dictadura sangrienta a través del más cívico de los ejercicios, una elección. ¡Ya lo habíamos hecho una vez! …pero no estaba destinado a pasar otra vez. Ortega desvirtuó todos los poderes del Estados. Es juez y parte, y encima de eso, hace trampa y mata gente. Óscar Arias lo engatusó una vez, pero no volverá a caer en la misma trampa.
El secuestro de Miss Nicaragua 2017
El quiebre de Manuel fue la acusación contra Berenice Quezada, la candidata a Vice Presidente de CxL. Entre otros disparates, la acusaron «de fomentar el odio». Estos majes se pasan de payasos, de plano.
Cuando echaron virtualmente presa a una muchacha cuyo único error fue agarrarle la vara a la Tia Kitty…pues, ahí ya le cayó el 20 al prix.
Pero no les bastó con eso. Ahí nomasito, le cancelaron la personería jurídica a CXL, y de ipegüe, le quitaron la nacionalidad nicaragüense a Kitty Monterrey. Podes leer todos los detalles escabrosos aquí. Supongo que a eso se refiere la Vice Dictadora cuando dice que ellos siempre van «mas allá».
Yo hubiera creído que se iban a esperar a estar más cerca de las votaciones, pero no. El Comandante vio a Berenice, y le dio tanto miedo, que prefirió declarar fraude prematuro con las elecciones.
Imaginate…la comunidad internacional todavía le estaba dando el beneficio de la duda, y él…no se quiso arriesgar a ver el Choque de Titanes entre Berenice y la Chayo.
«Juego de Tronos» se queda chiquito
En un giro de la trama digno de Westeros, Kitty Monterrey pasó de ser fabricante de reyes – ok, candidatos -, guardiana de los sellos de la Oposición Genuina…a convertirse en una fugitiva.
La tia de Manuel era la persona equivocada en el momento equivocado. Su sectarismo le quitó impulso a la unificación de la oposición a Daniel Ortega. Nunca estuve de acuerdo con sus decisiones, ni con su estilo confrontativo hacia los posibles aliados – repitan conmigo, «el enemigo de mi enemigo es mi amigo» -. Pero lo que el régimen esta haciendo con ella, además de ilegal, es grotesco. Nadie tiene el derecho de quitarle la nacionalidad nicaragüense a un nica. Nadie.
Pero claro, seguro los Masacrines están confundidos, por andar regalando tanta nacionalidad a prófugos de la justicia salvadoreña.
Creen que si la dan como caramelos, también la pueden quitar así nomás.
El próximo capítulo
Este domingo, en Esta Semana, Carlos Fernando Chamorro entrevistó a dos politólogos internacionales, el norteamericano Michael Shifter, presidente de Diálogo Interamericano; y Daniel Zovatto, director regional del Instituto Internacional para la Democracia y la Asistencia Electoral, IDEA Internacional. Es una hora de análisis puro y duro, que deja claro cómo encaja el problema Nicaragüense en la región.
Pueden ver la entrevista aquí. Háganlo, porque les va dar mas elementos para entender cual será el camino para salir de esta peste. Pero para efectos inmediatos e internos, lo más importante es esto:
«La vía electoral esta cerrada. Estas elecciones ya han perdido, hoy, 8 de agosto, ya han perdido toda legitimidad. No tenemos que esperar al 7 de noviembre, como hubiera sido quizás la opción, si Ciudadanos por la Libertad hubiera podido participar. Es decir, (Ortega) ha adelantado la fecha, del 7 de noviembre, al 8 de agosto. Es una elección completamente ilegítima.»
Daniel Zovatto, IDEA – Esta Semana, Agosto 8, 2021.
¡Gracias, Capitán Obvio!
Suena obvio, pero no está de más remarcarlo. Para bien y para mal, el 7 de Noviembre era una referencia, especialmente a nivel internacional. Un plazo a futuro cercano, un ápice de esperanza. Un día que podría marcar el fin de Daniel Ortega.
Ahora que ya no tenemos esa fecha, necesitamos un hito en el tiempo. Un momento que nos sirva no sólo para marcar un momento en la secuencia de crímenes. Otro plazo fatal, que justifique reclamos ante la comunidad internacional, para que tome medidas contra la dictadura. Irónicamente, fue el mismísimo Ortega el que puso esa fecha.
La hora de los presos políticos
Mi principal reparo con las elecciones venía de mi convicción que no podían tenerse elecciones libres mientras hubieran presos políticos en las cárceles. Ortega tiene una vieja afición por secuestrar gente, inventarle cargos criminales y meterla en la cárcel. Miguel Mora nos contó en esta edición del podcast de Bacanalnica, como para cuando perdió las elecciones del 90, Ortega tenía a miles de presos políticos en las cárceles.
Seis dias más tarde, el régimen estaba secuestrando por segunda vez a Miguel. Desde el 21 de junio, no se ha sabido nada de él.
Si tenés a Ortega mandando, alístate, que hay presos políticos en algún lugar del país. Según el diario La Prensa, el más antiguo es Marvin Gutiérrez, «El Cachorro», secuestrado desde el 2011. Podés saber mas sobre él en este artículo.
La represión del 2018 trajo consigo otra ola de secuestros. Aquí, Ortega entró en ese «estira y encoge» que pone en evidencia como ve a los ciudadanos como fichas de cambio en un juego perverso. Apresaba y liberaba según su conveniencia. Algunos quedaron permanentemente retenidos. Edward Lacayo, «La Loba», sigue ahí desde marzo 2019. Podés conocer más de su historia aquí.
Para finales de Abril 2021, el número de presos políticos se calculaba en al menos 120. Semanas más tarde, usando el tridente de leyes represivas que incluye la Ley de Agentes de Extranjeros, la Ley de Ciberdelitos, y la Ley de Crímenes de Odio, la dictadura empezó a encarcelar a precandidatos presidenciales, políticos opositores y activistas. Y porque estos represores navegan con bandera de «legalidad», emitieron ordenes de detención por noventa días para «investigar» los supuestos crímenes.
La primera en la fila
No porque sea Chamorro ni porque me caiga bien, pero Cristiana Chamorro fue la primera detenida de esa tanda. El miércoles 2 de junio, una tropa de policías armados hasta los dientes invadieron su hogar para detenerla. Desde entonces, está confinada en una habitación, plan «casa por cárcel».
Pues el martes 31 de Agosto, se cumplen esos 90 días «de ley».
Eso quiere decir que el 31 de Agosto, el régimen tendrá que liberar a Cristiana, o acusarla formalmente de algún delito (inventado) e iniciar un proceso judicial. Y lo que hagan en su caso, marcará la pauta de lo que pasará con los demás detenidos.
Y poco tiempo después, se vencen los 90 días de Arturo Cruz, Félix Maradiaga, Juan Sebastián Chamorro y tantos otros.
Ortega se va a fregar con sus mismas leyes balurdes
¡Claro! Ya sabemos que esas leyes son ridículas, y que igual, las aplican como les da gana. Pero al menos esa fecha supone una referencia, una marca en el calendario. Ese día algo tiene que pasar. Y lo que sea que Ortega vaya a hacer, va a generar una reacción, nacional e internacional.
Quisiera creer que van a liberar a Cristiana y a todos los presos políticos, incluyendo a los que tienen años de languidecer injustamente en las cárceles. Si eso no sucede, entraremos en un nuevo capitulo en la saga de la caída de los Ortega-Murillo. Lástima que esa caída sea en cámara lenta, y que cueste tanto dolor y sufrimiento.
Y justo ahorita que termino de escribir estas líneas, veo una bandada de tuits reportando que secuestraron a Mauricio Díaz, ex diplomático de la República, y vocal nacional de CXL. Diaz acaba de declarar en la fiscalía. Durante su detención, golpearon a su hijo y a su abogado, quienes lo acompañaban.
Mientras los Ortega-Murillo estén mandando, toda Nicaragua es una cárcel. La única diferencia es que algunos calabozos tiene rejas y paredes. Otros, no.
Muy acertado Juan Carlos, el 31 de Agosto algo tiene que pasar.