A causa de Luna empece a comprar periodicos

 

Luna es la cachorra Doberman Pincher miniatura de la casa en la que actualmente habito. Me encariñe de ella desde el primer día que la vi en su natal Jinotega. Me la vendieron con la sospecha que tenía más de Chichuahua que de Dobermann, pero no me importó… la quise, como si no era un regalo para Yahoska, desde que la puse en mi mano y ella se acurruco para protegerse del frío de diciembre. Continua el relato en leer más…

Al principio limpiar su regalitos era sencillo; onda respiración y una hoja de papel sanitario. Pero ha crecido y el veterinario me indico la necesidad ejercitarla y sacarla a la calle para fines de socialización con otros canes – Mi veterinario es el encantador de perros del Animal Planet -. Aparentemente los perros gustan de marcar su territorio con orina y eses fecales, de esa manera la indican a los otros canes; sexo, edad y estado civil. El problema es que si uno se gloria (vana) de ser de las pocas personas con principios cívicos en el barrio, termina por sentir vergüenza si deja «presentes» frente a la puerta del vecino. Es por eso que yo recojo las suciedades de Luna.

El problema principal esta que las servilletas y papel sanitario tienen un precio bastante respetable. Y es por eso que torne la atención hacia los periódicos nacionales. No culpó a Luna, ni a la «Moral y Cívica» de César Escobar (1991 MED), la culpa es de internet y de los dueños de los diarios que suben las noticias a la red mundial, eso y que el día anterior en la televisión y la radio nacional transmiten todas las noticias de mañana y lógicamente pierde sentido comprar periódicos si se carece de una razón de peso; mantener la casa y el vecindario limpio de eses caninas. 

Tampoco se crean que adquiero los dos periódicos, ellos mismos dicen que la tortilla esta por las nubes y el papel – desafortunamente – no sabe bien con sal y queso. Compró un periódico en relación al suplemento del día; tamaño y número de páginas que se traduce en más metros cuadrados para el manejo y empaque de orina y eses fecales.

Agradezco a los periodistas que aún creen en la nobleza de su trabajo y se presentan con un alto espíritu combativo – por la verdad – no les leeré pero mantendré el vecindario limpio, total ese es el propósito de todo buen periodista; ser útil a la sociedad y educarla.

 

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Nota del editor: Este blog representa la opinión particular del autor. Como quien dice, la «culpa» es totalmente de German.